Varios bancos públicos de desarrollo reunidos esta semana en la Cumbre Finanzas en Común en Cartagena, Colombia, se han comprometido a cooperar en una Hoja de Ruta de Financiación Azul para actuar con rapidez en la protección y el uso sostenible de los océanos.
En la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos, que se celebrará en Francia en 2025, se presentará información actualizada sobre los avances de esta hoja de ruta. Bajo el lema «Un llamamiento a la acción positiva en favor de los océanos», esta cooperación ha sido promovida por la Agencia Francesa de Desarrollo AFD), el Banco Asiático de Desarrollo (BAsD), el CAF-Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe, el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD), el Banco Europeo de Inversiones (BEI), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco de Desarrollo KfW de Alemania y el Banco de Desarrollo de África Occidental (BOAD). La iniciativa contribuirá a mejorar la coordinación entre los bancos públicos de desarrollo para alinear sus intervenciones.
«El océano /-/ nos suministra oxígeno para respirar, contribuye a la seguridad alimentaria, a la nutrición y a empleos y medios de vida dignos. Ahora bien, las actividades de explotación no sostenibles, la contaminación por productos químicos y plásticos y la crisis climática, con sus repercusiones en la temperatura y la acidificación de los océanos, amenazan a las especies y los ecosistemas marinos de todo el mundo», reza la declaración. «Así pues, la protección y el uso sostenible de los océanos son fundamentales para alcanzar un desarrollo sostenible y erradicar la pobreza. El mundo necesita urgentemente abordar estos problemas e invertir a gran escala en soluciones para proteger los océanos».
La Hoja de Ruta de la Financiación Azul reunirá los conocimientos y la experiencia de todas las inversiones en los océanos llevadas a cabo por las organizaciones participantes, garantizará la rendición de cuentas e identificará deficiencias de financiación pendientes de solución y oportunidades de financiación realistas. La cooperación debería contribuir a garantizar una ambición renovada por parte de los bancos públicos de desarrollo en lo que respecta a una economía azul sostenible, prosigue la declaración.
Los bancos de desarrollo pueden contribuir a la biodiversidad y a una economía azul sostenible financiando la reducción de la contaminación oceánica con infraestructuras de aguas residuales, aguas pluviales y residuos sólidos, pero también invirtiendo en zonas marinas protegidas, puertos ecológicos, transporte marítimo más ecológico, energías oceánicas renovables, economía circular y sectores emergentes como la acuicultura sostenible, incluidas las algas y la maricultura, las biotecnologías azules, los datos oceánicos, la restauración y la captura de carbono azul.
En la declaración se hace igualmente hincapié en que los bancos públicos deben atenerse al principio de «no causar daños», siguiendo la directriz de la Iniciativa de Financiación de la Economía Azul Sostenible, auspiciada por la ONU, y no comprometer los servicios ecosistémicos del capital natural azul. Además, se anima a estos bancos a esforzarse por adoptar un enfoque proactivo «haciendo el mayor bien posible». Esto se traduce en contribuciones significativas a la acción por el clima, la protección de la biodiversidad y el fomento de medios de vida sostenibles.
El texto completo de la declaración figura más adelante.
(datos de contacto de los responsables de los medios de comunicación que emiten la nota de prensa)
Acerca del Banco Asiático de Desarrollo (BAsD)
El BAsD tiene el firme compromiso de lograr una región de Asia y el Pacífico próspera, inclusiva, resiliente y sostenible, manteniendo al mismo tiempo sus esfuerzos por erradicar la pobreza extrema. Fue fundado en 1966 y cuenta con 68 miembros, 49 de ellos de la región. Sus principales instrumentos para ayudar a sus países miembros en desarrollo son diálogo político, préstamos, inversiones en capital, garantías, ayudas y asistencia técnica.
Acerca de la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD)
El Grupo AFD contribuye a la puesta en marcha de las políticas francesas de desarrollo sostenible y solidaridad internacional. El Grupo está formado por la AFD, que financia el sector público, las ONG, así como la investigación y formación; su filial Proparco, dedicada al sector privado; y Expertise France, una agencia de cooperación técnica. El Grupo financia, apoya y acelera las transiciones necesarias para un mundo más justo y resiliente.
En colaboración con nuestros socios, desarrollamos soluciones comunes con y para los ciudadanos de más de 150 países y de los 11 departamentos y territorios de ultramar franceses. Como parte del compromiso de Francia y de los franceses con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, nuestros equipos están trabajando en 4 200 proyectos sobre el terreno. Nuestro objetivo es conciliar el desarrollo económico con la protección de los bienes comunes, desde la paz, el clima y la biodiversidad hasta la salud, la educación y la igualdad de género. Por un mundo en común. afd.fr/en
Acerca del BID
El Banco Interamericano de Desarrollo tiene como objetivo mejorar la vida de las personas. Creado en 1959, el BID es una de las principales fuentes de financiación a largo plazo para el desarrollo económico, social e institucional de América Latina y el Caribe. El BID lleva igualmente a cabo proyectos de investigación de vanguardia y proporciona asesoramiento político, asistencia técnica y formación a clientes tanto en el sector público como en el privado de toda la región.
Acerca del CAF
La misión del CAF-Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe es promover el desarrollo sostenible y la integración regional mediante la financiación de proyectos de los sectores público y privado, la cooperación técnica y otros servicios especializados. Constituido en 1970 y formado en la actualidad por 20 países —18 de América Latina y el Caribe, junto con España y Portugal— y 13 bancos privados, es una de las principales fuentes de financiación multilateral y un importante generador de conocimiento para la región. Más información www.caf.com
Acerca del Banco Europeo de Inversiones
El Banco Europeo de Inversiones (BEI) es la institución de financiación a largo plazo de la Unión Europea cuyos accionistas son sus Estados miembros. Financia inversiones sólidas que contribuyen a los objetivos de las políticas de la UE. Apoya proyectos en áreas de infraestructuras, innovación, clima y medio ambiente, así como pequeñas y medianas empresas. EIB Global se encarga de llevar a cabo nuestras operaciones fuera de la Unión Europea. Como socio clave de la iniciativa de la Unión Europea Global Gateway, nos hemos propuesto aportar al menos 100 000 millones de euros de inversión de aquí a 2027, un tercio del objetivo de la estrategia. Con oficinas en todo el mundo, EIB Global está cerca de las personas, empresas e instituciones locales, y promueve una estrecha colaboración del Equipo Europa con las instituciones de financiación del desarrollo.
Acerca de BOAD
El Banco de Desarrollo del África Occidental (BOAD) es la institución común de financiación del desarrollo de los países miembros de la Unión Monetaria del África Occidental (UMAO). Es una institución pública internacional cuyo objeto, de acuerdo con el artículo 2 de sus estatutos, es promover el desarrollo equilibrado de sus países miembros y favorecer la integración económica en África Occidental mediante la financiación de proyectos de desarrollo prioritarios. Está acreditada ante los tres mecanismos de financiación de la lucha contra el cambio climático: Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM), Fondo de Adaptación (FA) y Fondo Verde para el Clima (FVC). Desde 2009, el BOAD participa como observador en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) y participa activamente en los debates sobre la creación de un sistema internacional de financiación para la lucha contra el cambio climático. Desde enero de 2013, alberga el primer Centro de Colaboración Regional (CCR) sobre el Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL), cuyo objetivo es prestar apoyo directo a gobiernos, ONG y sector privado en la identificación y el desarrollo de proyectos MDL. El Banco es miembro activo del Club Internacional de Financiación del Desarrollo (IDFC, por sus siglas en inglés), que agrupa a veintiséis bancos de desarrollo nacionales, regionales y bilaterales.
Acerca del BERD
El BERD invierte en cambiar la vida de las personas desde Europa Central hasta Asia Central, los Balcanes Occidentales y la región del Mediterráneo Meridional y Oriental. Desde 1991, ha invertido más de 180 000 millones de euros en unos 6 800 proyectos. Prestando especial atención a la colaboración con el sector privado, invierte en proyectos, participa en el diálogo político y proporciona asesoramiento técnico que fomenta la innovación y desarrolla economías modernas competitivas, bien gobernadas, ecológicas, inclusivas, resilientes e integradas. El Banco está integrado por 71 países, además de la UE y el BEI. El BERD es líder en financiación climática y ahora aspira a convertirse en un banco mayoritariamente verde antes de 2025.
En 2022, el BERD, el BEI y la Unión por el Mediterráneo, con el apoyo de la UE, anunciaron la creación de la Asociación Azul, cuyo objetivo es fomentar el desarrollo de una economía azul sostenible en los países vecinos del sur de la UE en la región mediterránea.
Los bancos públicos de desarrollo instan en Cartagena a que se actúe en favor de los océanos
- El océano es una de las principales fuentes de biodiversidad del planeta y desempeña un papel vital en el sistema climático. Proporciona una amplia gama de servicios ecosistémicos, nos suministra oxígeno para respirar, contribuye a la seguridad alimentaria, a la nutrición y a empleos y medios de vida dignos. Ahora bien, las actividades de explotación no sostenibles, la contaminación por productos químicos y plásticos, así como la crisis climática, con sus repercusiones en la temperatura y la acidificación de los océanos, amenazan a las especies y los ecosistemas marinos de todo el mundo. Así pues, la protección y el uso sostenible de los océanos son fundamentales para alcanzar un desarrollo sostenible y erradicar la pobreza. El mundo necesita urgentemente abordar estos problemas e invertir a gran escala en soluciones para proteger los océanos.[1]
- En la Declaración conjunta de todos los bancos públicos de desarrollo del mundo[2] inicial de 2020 tras la primera Cumbre de Finanzas en Común, apoyamos la alineación de nuestras actividades con los objetivos del Acuerdo de París. Nos comprometimos a desarrollar o reforzar las estrategias, la financiación y la cooperación entre bancos públicos de desarrollo (BPD) y los sectores público y privado con la premisa común de que la conservación, la gestión sostenible y la protección de la biodiversidad, los océanos y la naturaleza son los cimientos esenciales del desarrollo. También declaramos nuestra disposición de contribuir a alinear todos los flujos financieros con el Marco Mundial para la Biodiversidad post-2020[3].
- En junio de 2022, en la declaración final de la Conferencia sobre los Océanos de Naciones Unidas celebrada en Lisboa, «Nuestros océanos, nuestro futuro, nuestra responsabilidad», los Jefes de Estado y de Gobierno se comprometieron a «[e]studiar, desarrollar y promover soluciones de financiación innovadora para impulsar la transformación hacia economías sostenibles basadas en los océanos, así como la ampliación de las soluciones basadas en la naturaleza, los enfoques de carácter ecosistémico para apoyar la resiliencia, la restauración y la conservación de los ecosistemas costeros».[4]
- Reconocemos los esfuerzos del Panel de los Océanos, un compromiso liderado por diecisiete Jefes de Estado comprometidos con la gestión sostenible del 100 % de la superficie oceánica bajo jurisdicción nacional, guiados por planes oceánicos sostenibles para 2025, y los múltiples esfuerzos regionales e internacionales puestos en marcha para lograr avances decisivos en océanos y clima, incluida la reciente Declaración de Moroni para la Acción Oceánica y Climática en África[5], de cara a la cumbre climática COP28 de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC).
- La reciente adopción del Acuerdo sobre biodiversidad fuera de las jurisdicciones nacionales (BBNJ, por sus siglas en inglés) pone de relieve la necesidad de una gobernanza de la alta mar para proteger la biodiversidad. Dado que la mayor parte de los océanos son aguas internacionales, es fundamental garantizar que la alta mar se incluya en nuestros esfuerzos por apoyar la acción sostenible en los océanos.
- Conscientes de la deficiencia de financiación para la protección de los océanos y de la urgencia de proporcionar recursos financieros adecuados, accesibles, nuevos y predecibles para apoyar una economía azul sostenible, y para proteger los océanos a la luz de los crecientes factores de estrés sobre los ecosistemas marinos, nosotros, los abajo firmantes, hacemos un llamamiento a la acción para trabajar juntos en la promoción de una financiación azul sostenible y apoyar acciones positivas para los océanos. Nuestro objetivo es hacer aportaciones concretas en la Conferencia de Naciones sobre los Océanos 2025 que se celebrará en Francia en junio de 2025, coorganizada en colaboración con Costa Rica.
- Los programas de desarrollo, los proyectos y las inversiones en financiación azul deberían ajustarse a las directrices emitidas en el marco de la Iniciativa de Financiación de la Economía Azul Sostenible de Naciones Unidas y no deberían socavar los servicios ecosistémicos del capital natural azul (el principio de «no causar daños»). Además, deberían esforzarse por contribuir lo más sustancialmente posible a los objetivos climáticos, de biodiversidad y de medios de vida sostenibles (una ganancia neta o el objetivo de «hacer el mayor bien posible»). Este enfoque reconoce la necesidad de una visión renovada de la economía azul.
- Este esfuerzo no solo contribuirá a la consecución del ODS 14, sino también de los ODS 13 (clima) y 8 (trabajo decente y crecimiento económico), entre otros, y también abordará la dimensión marina de los objetivos del Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal.
- Las actividades básicas de los bancos públicos de desarrollo, como la financiación de la reducción de la contaminación mediante infraestructuras de aguas residuales, aguas pluviales y residuos sólidos, contribuyen a proteger las aguas costeras, su biodiversidad y su valor para las comunidades costeras. Favorecen la producción de alimentos acuáticos, las actividades recreativas y el bienestar general. La ordenación del espacio marino basada en los ecosistemas, el desarrollo terrestre en consonancia con la protección de los ecosistemas marinos y teniendo en cuenta los riesgos relacionados con el clima, como la subida del nivel del mar, mediante una investigación, desarrollo de capacidades, seguimiento y gestión adecuados son también clave para el éxito de las inversiones dirigidas a reforzar la resiliencia.
- Los bancos públicos de desarrollo también desempeñan un papel importante en la transición que se requiere, así como en la puesta en marcha de una economía azul regenerativa cuando invierten en sectores estratégicos como las zonas marinas protegidas, los puertos ecológicos, un transporte marítimo más ecológico, la energía oceánica renovable, la economía circular, pero también en sectores emergentes como la acuicultura sostenible, incluidas las algas marinas y la maricultura, las biotecnologías azules, los datos oceánicos, la rehabilitación y la captura de carbono azul.
LLAMAMIENTO A LA ACCIÓN
Habida cuenta de las consecuencias del calentamiento global y de la degradación del medio ambiente, en particular para los océanos, así como de la necesidad —y la oportunidad— de actuar con rapidez para hacer frente a sus efectos, los bancos públicos de desarrollo, al sumarse a este llamamiento a la acción, de acuerdo con sus propias normas y procedimientos, se esforzarán por cooperar en una Hoja de Ruta de la Financiación Azul.
Esta Hoja de Ruta de la Financiación Azul tratará de reflejar la visión y el alcance de las inversiones positivas en los océanos de los BPD, identificar deficiencias de financiación y oportunidades de financiación realistas, facilitar el intercambio de conocimientos y fomentar la rendición de cuentas. Esta hoja de ruta y sus avances se presentarán durante la Conferencia de Naciones Unidas sobre los Océanos de 2025 e ilustrará y garantizará que los BPD estén en buena posición para llevar a buen puerto una renovada ambición de una economía azul sostenible.
[1] Northrop, E, Khan, M, Beguin Billecocq, I, Lecerf, M, Picourt, L, Thiele, T et al (2022) The Ambition Loop for the Ocean: Achieving Ambitious 2030 Climate Action. Sumario de políticas. https://climatechampions.unfccc.int/wp-content/uploads/2022/11/Ocean-Climate-Tracker-Report-WRI-_-HLCs.pdf
[2] https://financeincommon.org/sites/default/files/2021-06/FiCs – Joint declaration of Public Development Banks.pdf
[3] https://www.cbd.int/doc/c/e6d3/cd1d/daf663719a03902a9b116c34/cop-15-l-25-en.pdf
[4] UNOC_political_declaration_final.pdf
[5] https://www.iucn.org/sites/default/files/2023-06/moroni-declaration-great-blue-wall_june-2023_0.pdf
[6] https://www.nature.com/articles/s41467-021-23168-y
